¿Te has dedicado a pensar cuántas escritoras dominicanas conoces versus la cantidad de escritores? Lo pensé bastante, incluso hice una lista por provincias, me di cuenta de que es muy fácil identificar decenas de escritores en cada parte del país, mas identificar escritoras es un gran reto. Sin lugar a duda, contamos con escritoras destacadas, en las que no cuesta pensar, pero un breve ejercicio te demostrará que siempre la lista de nombres masculinos será mayor, por mucho. ¿Por qué se da este fenómeno? ¿Acaso son más los escritores que las escritoras? ¿Los hombres escriben mejor que las mujeres y por eso se destacan más? ¿O será que las oportunidades de desarrollo y difusión de la literatura escrita por hombres es mayor? Si revisamos los catálogos de las editoriales, constatamos que los títulos son en su mayoría de escritores, sin excepción (hasta que fundamos Editorial Anticanon). Esta es la realidad central que el Proyecto Anticanon pretende remediar. 

El concepto surge en 2017 tras el panel Las imprescindibles del canon literario dominicano en que el participaron las escritoras Chiqui Vicioso, Isis Aquino y Ángela Hernández; cuando le propuse a esta última que necesitábamos propiciar un espacio para seguir trabajando el tema y poner de relieve a las escritoras marginadas del canon, dijo “¿para qué seguir hablando del canon y la exclusión de las mujeres, mejor vamos a hablar del anticanon, de los valores de la literatura escrita por mujeres”. Así que en esencia, el concepto Anticanon lo hemos acuñado y define aquellos valores de la literatura escrita por mujeres que de algún modo rompe o amplía el esquema apreciativo canónico. 

En el 2018 organizamos el primer Ciclo de Literatura en Femenino: Anticanon; en esta primera ronda de actividades (panel, conversatorio y recital) las escritoras Ibeth Guzmán, Ángela Hernández y Denise Español comenzaron a estudiar de manera crítica la literatura escrita por mujeres y a poner en relieve la experiencia estética que tradicionalmente es marginada e invisibilizada por un canon literario que a juicio de la escritora Beatriz Suárez Briones (España) es “masculino, blanco, burgués, heterosexual y occidental”. Otras escritoras se han sumado a los posteriores ciclos con sus estudios y propuestas de valor, como Michelle Ricardo, Yuderkys Espinosa, Petra Saviñón, Rossalina Benjamín y quien escribe. Nos interesa demostrar que la literatura escrita por mujeres es más que “sensiblería” y “cotidianidad”, como algunos injustamente pregonan y otros de manera infundamentada piensan.  

Algunos de valores anticanónicos que hasta el momento se han estudiado son: La ruptura del mito de que las mujeres cuando se trata de decir prefieren la proliferación de palabras; la actitud de desafío y provocación, empujar más allá del límite (que impone la sociedad, la época y la cultura); la osadía de no tener miedo a la expresión significativa y profunda del ser y la existencia; el rescate de la ancestralidad afro-taína en la literatura; el cuerpo como espacio de rebeldía y autoconocimiento; la  exploración de la ironía, el lenguaje “soez” y las bromas… Hasta el momento la lista de valores anticanónicos es muy larga. 

Para 2019, además del ciclo de literatura organizamos el 1er Encuentro Nacional de Escritoras; aproximadamente 60 de nosotras nos encontramos en el Centro Cultural de España para pasar un día en mesas de trabajo, diálogos y paneles a fin de cumplir con el principal propósito: ¡Conocernos para reconocernos! Este además es el lema del Proyecto Anticanon, y, sí, nos dimos cuenta de que no se trata de que los escritores sean más, se trata de que en efecto tienen más y mejores oportunidades de difusión, promoción y validación social. Para el año 2020 la lista de escritoras inscritas para el 2do Encuentro Nacional de Escritoras superó las 250 de diversas edades y géneros literarios, provenientes de todas partes del país y de la diáspora en Estados Unidos y España, lo que demuestra claramente que las escritoras dominicanas somos muchas, muchísimas. 

El Proyecto Anticanon, en resumen, es una investigación-acción, un esfuerzo por generar espacios de encuentro, estudio y reflexión de la literatura escrita por mujeres; además busca promover la figura y trabajo de las escritoras dominicanas, una apuesta por la visibilidad, justicia y equidad. 

Las actividades antes mencionadas se complementan con la exposición fotográfica Mujeres Anticanónicas, que muestra retratos de 55 escritoras junto a sus perfiles profesionales. Los Anticanon Gozosos son actividades de estudio y análisis de textos de escritoras que buscan involucrar el cuerpo y el disfrute en el proceso. El Taller de Escritura Anticanónica que se inaugura este mes de septiembre persigue constituir un espacio de creación consciente desde los valores ya identificados; trabajando de manera exclusiva la experiencia estética de las mujeres, por último, el proyecto incluye la Editorial Anticanon que solo publica mujeres. Desde el 2019 a la fecha cuenta con 11 títulos de poesía en un formato de bolsillo a bajo costo. 

Para la escritora Petra Saviñón el Proyecto Anticanon es “una ruptura con lo predecible” es además “arte que rompe el canon”, no creo que exista una mejor definición que esa. Una propuesta en la que caben poetas, narradoras, dramaturgas, guionistas, historiadoras, investigadoras, periodistas, en fin, todas las mujeres que escriben, las que trabajan con las palabras como principal material. Se trata de un proyecto inclusivo e integrador. Esa cualidad es la que ha permitido que este crezca; en un primer momento comencé a trabajar el concepto como proyecto personal, pronto la poeta Michelle Ricardo se unió a la gestión, a ella le siguieron Denisse Español, Patricia Minalla, Petra Saviñón y Arlene Sabaris sensibilizadas por el objetivo cardinal de promover la literatura, nuestra literatura. 

Durante la exposición fotográfica Mujeres Anticanónicas las personas entraban a las salas del Taller Público Silvano Lora y decían “wao, ¿todas son escritoras?” o preguntaban “¿en verdad tenemos tantas escritoras?” Esas expresiones nos permiten constatar que lo que hacemos es necesario, relevante y pertinente. Una labor extrema sin dudas, no nos han faltado las críticas y los ataques de aquellos que no entienden o pretenden desvirtuar el objetivo del proyecto señalando que “es excluyente y discriminatorio para los hombres”, o cuestionándonos sobre quiénes somos nosotras para definir el anticanon. Por supuesto, no nos afecta porque esa es la voz irascible del patriarcado en su rabieta por imponerse. 

No vale la pena explicar por qué un proyecto que busca mayor visibilidad y espacio para las mujeres NO representa, en lo absoluto, menos derechos o visibilidad para los hombres; pero sí vale el esfuerzo aclarar que tenemos todo el derecho y las capacidades el mundo para definir y conceptualizar la palabra anticanon, o cualquier otra que se nos ocurra. Porque todas las escritoras que nos hemos enfrascado en esta investigación-acción estamos, más que preparadas, como profesionales y artistas; además estoy segura que si fuésemos hombres, nadie cuestionaría nuestro derecho o capacidad. 

El Proyecto Anticanon es ambicioso, busca cambiar/conquistar el mundo. Nos tomamos muy en serio esta tarea por tanto, propiciamos espacios de formación y valoramos la crítica constructiva. Trabajamos desde la idea de comunidad-colectividad, nos interesa avanzar juntas, he aquí otro valor anticanónico en un mundo diseñado para rivalizar a las mujeres.

___ 

Lauristely Peña Solano, Bohío Viejo, Montecristi, 1989. Escritora, docente y gestora cultural. Ha publicado los poemarios Dictado de luna (2015), Abyecta (2018), Roja (2019). Es co-fundadora del Proyecto Anticanon y la Editorial Anticanon.